En la escuela de Amancay, los chicos del Taller de Amboy estaban “de locales”, y eso se notaba en el recibimiento de los niños, que los llamaban por sus nombres y se acercaban a darles besos cariñosos :-)

Arrancamos el taller con los chicos de 2do. ciclo. Compartimos charla, peli y juego, y aunque, costó que algunos de los más revoltosos participaran, otros compensaron poniéndole ¡mucha onda! También las docentes acompañaron, y entre todos reflexionamos sobre la situación del campo y la soja, y recordamos la importancia de que Villa Amancay esté resguardada de la problemática, gracias a la activa participación de los compañeros de la asamblea, vecinos, y algunos funcionarios a favor de la vida.

Después, seguimos la actividad con los más chicos, y a los tres cursos del 1er. ciclo se sumaron también los chiquitos de jardín y preescolar. A ellos les encantó la peli, y el juego, y la canción… ¡y también a las maestras! Que estaban entusiasmadas con la actividad y participaron con mucha predisposición. Además, según nos contaron, eligieron la canción del final de la peli para representar en el acto de fin de año, ¡qué alegría!

Fue un gustazo conocer esta escuela y a este grupo de docentes que viene trabajando muy a conciencia sobre las problemáticas ambientales; y a su directora Carina Checa, un ser sensible y hermoso a quien agradezco la invitación y el cariño brindado.

¡Un abrazo grande a toda la escuela Roque Saenz Peña y espero que sigamos compartiendo inquietudes, aprendizajes y vivencias!